Hay que tomar medidas. Esa es la consigna frente a la amenaza de la nueva variante ómicron de coronavirus. Por esa razón, el Gobierno nacional analiza la implementación de un pase sanitario para el acceso a los lugares de trabajo y en el transporte público de pasajeros.
El ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, fue quien advirtió que el Gobierno analiza esa posibilidad de exigir un pase sanitario en lugares cerrados. "Hablamos de todo evento en lugares cerrados, transporte público, trabajo", anunció el funcionario.
La preocupación
Kreplak también resaltó que las vacunas aplicadas contra el coronavirus podrían perder parte de su eficacia frente a la variante ómicron, a la que calificó como "realmente preocupante".
El funcionario reconoció que la preocupación por la nueva variante se da "porque sería más transmisible que la delta. "Existe incertidumbre porque tiene muchas mutaciones, y efectivamente, eso va a cambiar la forma en la cual las vacunas interactúan con el virus y puede bajar la eficacia de las vacunas. Eso todavía no se sabe, pero es de preocupación", resaltó.